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Un documental recoge experiencias y aprendizajes de jóvenes comprometidos tras la Conferencia de Juventud

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Bahai.es Prensa - Fotograma documental equipados para una vida de servicio

Consulta acerca de la identidad de los jóvenes, en el documental

La Comunidad Bahá’í de España ha elaborado un documental que recoge algunas de las experiencias y los aprendizajes de jóvenes comprometidos con el servicio en sus comunidades. Un gran movimiento juvenil mundial que cobró impulso en las históricas 114 Conferencias de Juventud del verano pasado.

MADRID, España – Multitud de jóvenes comprometidos con su transformación personal y de sus comunidades mediante el servicio a los demás, participan activamente en los programas que la comunidad bahá’í promueve en todo el mundo. Varios centenares de ellos se dieron cita el verano pasado en la Conferencia de Juventud de Madrid, tras la cual regresaron inspirados a sus comunidades con determinación para aplicar las reflexiones de la Conferencia en su entorno cercano. Los meses siguientes a la Conferencia de Madrid, que fue una más en la serie de 114 Conferencias de Juventud que tuvieron lugar en todo el mundo, han sido unos meses con muchos aprendizajes por parte de estos jóvenes. Algunas de estas reflexiones y experiencias han sido recogidas en el documental «Equipados para una vida de servicio».

El documental ha sido realizado por el cineasta bahá’í Karlos Alastruey, a petición de la Asamblea Espiritual Nacional. La primera proyección tuvo lugar en la Convención Nacional, un evento anual en el que delegados escogidos de toda España reflexionan acerca de los aprendizajes y experiencias del año en el territorio nacional.

Grabado en Madrid y Navarra, Equipados para una vida de servicio muestra jóvenes de diversas comunidades aplicando en la práctica lo aprendido en la Conferencia y otros espacios de reflexión. Apoyándose unos en otros, ofrecen a los niños y adolescentes de sus barrios programas de desarrollo material y espiritual, combinando actividades intelectuales, artísticas y servicio comunitario. Las experiencias de unos son compartidas y abrazadas por otros, con una actitud de aprendizaje esencial en este proceso que aún tiene mucho por avanzar.

Cómo contribuir a la consecución de un mundo más justo y unido, cómo emplear la educación para acompañar a las próximas generaciones de jóvenes, cómo detectar los talentos propios y canalizarlos hacia el bienestar común, o en qué consiste crear relaciones de amistad verdadera y apoyo mutuo, fueron algunos de los temas sobre los cuales los jóvenes reflexionan frecuentemente.

Multitud de amigos y vecinos (y en ocasiones instituciones locales) también preocupados por el bienestar de sus vecindarios, colaboran de múltiples modos, generándose de este modo dinámicas que buscan el mejoramiento de la comunidad.