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La cuestión bahá’í y los derechos humanos ausentes en el discurso del presidente Ruhaní en la ONU

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Bahai.es Prensa - Presidente de Irán Hasán Rouhaní

El presidente iraní, Hasán Ruhaní, se dirige a la Asamblea General de la ONU el 25 de septiembre de 2014. (Foto de la ONU)

NACIONES UNIDAS (BWNS) — El discurso del presidente de Irán, Hasán Ruhaní, hoy ante las Naciones Unidas no tuvo en cuenta una serie de cuestiones de derechos humanos fundamentales en Irán, incluyendo el motivo de la injusta y continuada persecución de los bahá’ís por parte de Irán.

«Hace un año, el presidente Ruhaní llegó al poder haciendo numerosas promesas de mejorar la situación de los derechos humanos en Irán, incluida la promesa de acabar con la discriminación religiosa», expresó Bani Dugal, la principal representante de la Comunidad Internacional Bahá’í ante las Naciones Unidas.

«Lamentablemente, ha incumplido sus promesas, y su falta de cualquier mención de los derechos humanos en su discurso de hoy en las Naciones Unidas solo sirve para subrayar este hecho».

A principios de este mes, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, emitió su informe anual sobre los derechos humanos en Irán, diciendo igualmente que las promesas de derechos humanos del presidente Ruhaní distan mucho de cumplirse.

«A pesar de las señales del presidente Ruhaní de una mayor apertura a la libertad de expresión, de asociación y de reunión pacífica, el Gobierno ha fallado en establecer un entorno propicio y seguro que sea conducente a la libertad de expresión», afirmó el Sr. Ban.

«Las minorías religiosas, como los bahá’ís y los cristianos se enfrentan a violaciones arraigadas en la ley y en la práctica. Las autoridades aplican habitualmente el hostigamiento, las redadas a los hogares y la incitación al odio, para reprimir a la comunidad bahá’í como muestran los informes», afirmó también.

La Sra. Dugal agregó que «la prueba de fuego de la sinceridad de Irán en el tratamiento de los derechos humanos es la forma en que trata a la comunidad religiosa minoritaria bahá’í, que es bien conocida en todo el mundo por su compromiso con la paz y no representa ninguna amenaza para el gobierno.

«Sin embargo, más de 100 bahá’ís permanecen en prisión y miles se ven privados del acceso a la educación superior o discriminados en el ámbito económico, todo como una cuestión de política gubernamental. Están empleando nuevas tácticas para aumentar la negación de tal discriminación».

La Sra. Dugal señaló que el presidente Ruhaní habló sobre los diversos «engaños» que están  inflamando el extremismo y el odio en contra de Irán.

«Sin embargo, Irán ha propagado sus propias ideas delirantes acerca de la Fe bahá’í. Durante el mandato del presidente Ruhaní, patrocinado por el Gobierno, la propaganda antibahá’í ha aumentado», afirmó; y señaló que durante los primeros seis meses de 2014 los incidentes de propaganda antibahá’í en medios de comunicación del gobierno aumentaron multiplicándose por  10, de 55 en enero a 565 en junio.

La Sra. Dugal afirmó que la ausencia de cualquier referencia por parte del presidente Ruhaní de un plan para mejorar el historial de derechos humanos de Irán requiere que el mundo le haga una serie de preguntas difíciles.

«En primer lugar, ¿cuándo llevará a la práctica Irán los derechos humanos que se ha comprometido a proteger en virtud del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que incluye la libertad de reunión, las protecciones al debido proceso y la libertad de religión?

»En segundo lugar, ¿cuándo detendrá el Gobierno la persecución sistemática contra los bahá’ís iraníes, que deseen trabajar por el bien de su país? ¿Cómo, en esta época, se puede negar esta oportunidad a un segmento tan pacífico de la sociedad?»

Artículo original: Bahá’í World News Service