—Madrid, 11 julio de 2017—. El pasado 1 de junio se celebró la segunda conferencia contra el Hambre en el Palacio de Cibeles, auspiciado por el ayuntamiento de Madrid y con la colaboración de la plataforma Carta contra el Hambre.
No obstante, el reconocimiento de las competencias de los ayuntamientos en esta materia en sí parece ser insuficiente para abordar la complejidad de la cuestión y evitar enfoques asistencialistas. Más bien, las políticas de distribución de alimentos deben encajar en un marco más amplio que avance hacia modelos alternativos de desarrollo social y económico, e ir acompañada de otras iniciativas que formen parte de una estrategia encaminada a empoderar a una población a avanzar hacia la soberanía alimentaria.
La adopción de una estrategia general holística que busque la complementariedad de enfoques; la búsqueda de la responsabilidad compartida entre el gobierno, la sociedad civil y el sector empresarial o el empoderamiento de los actores implicados son algunos de los principios planteados por la plataforma como fundamento a cualquier iniciativa que se pueda adoptar en el ámbito de la distribución de alimentos y que permearon el discurso a la largo de la conferencia.
Varios municipios de la comunidad de Madrid así como el ayuntamiento de la capital compartieron su experiencia en la mejora de la atención a las necesidades alimentarias de su población y la distribución de alimentos, en aras de reflejar dichas buenas prácticas en la formulación de políticas públicas.
La estrategia del ayuntamiento de Madrid consiste en tres líneas de acción superpuestas: el plan de derechos humanos, la suscripción al pacto de Milán y el apoyo a la Iniciativa Legislativa Municipal sobre el derecho a la alimentación.
El ayuntamiento de Madrid se ha comprometido a continuar con sus esfuerzos para mejorar la atención a las familias en situación de insolvencia alimentaria y ha mostrado su apoyo para que el derecho a la alimentación se convierta en una realidad y se haga efectivo.