Oficina de Asuntos Públicos

Noticias y notas de prensa

El sigiloso plan de Irán para destruir una comunidad entera

Comparte este contenido

El gobierno iraní está empleando medidas sistemáticas para alcanzar la erradicación de la comunidad Bahá’í —la mayor minoría religiosa no-musulmana en Irán— como entidad de cambio, según ha dado nota informalmente la Comunidad Internacional Bahá’í durante la Asamblea General de las Naciones Unidas.

El sitio web Archivos de la Persecución contra los bahá’ís en Irán recopila miles de documentos oficiales, informes, testimonios y materiales audiovisuales que revelan pruebas irrefutables de persecución incesante.

Actualmente, unos 60 Bahá’ís en Irán están encarcelados mientras decenas de miles más sufren persecución educativa, económica y cultural de forma diaria por el mero hecho de practicar su religión.

Los hogares de los Bahá’ís son saqueados de forma rutinaria y los miembros de la comunidad son arrestados y detenidos arbitrariamente. Los negocios dirigidos por Bahá’ís se cierran, negándoles la posibilidad de obtener un salario con el que poder llevar una vida digna, y a miles de jóvenes Bahá’ís iranís no se les permite acceder a estudios superiores o son expulsados de las universidades de forma rutinaria por practicar su fe.

«Estas medidas sistemáticas empleadas por el gobierno Iraní para negar a los Bahá’ís de sus derechos básicos son facetas de una política que tiene como objetivo destruir la comunidad Bahá’í como una entidad viable» declaró Diane Alai, representante de la Comunidad Internacional Bahá’í a las Naciones Unidas.

«Ni una sola familia Bahá’í en Irán ha sido inmune a la persecución. ¿Cuánto tiempo debe durar esto? Ya es hora de que la comunidad internacional haga un llamamiento a Irán para que cumpla sus compromisos y obligaciones ante la ley internacional y nacional, y cesar estos graves abusos».

A pesar de la condena de la comunidad internacional, de activistas y de miembros de la sociedad iraní, la persecución contra la comunidad continúa sin tregua. Los cementerios Bahá’ís son profanados y la incitación al odio a través de los medios estatales sigue aumentando, mientras que el derecho a reunirse se ve limitado por estrictas medidas. Más de 200 Bahá’ís —principalmente líderes de la comunidad— han sido asesinados o ejecutados. Miles más han sido sometidos a torturas o a prisión.

Desde entonces, la estrategia anti-Bahá’í del gobierno se ha centrado en la discriminación social, económica y educativa para intentar apaciguar la crítica internacional. Un memorándum secreto firmado por el Líder Supremo Iraní en 1991 define una estrategia para bloquear el progreso y el desarrollo de la comunidad Bahá’í iraní así como para «negarles el empleo si se identifican como Bahá’ís», entre otras medidas.

Por cuatro décadas, los Bahá’ís continúan siendo arrestados de forma regular, detenidos y encarcelados por practicar su fe a pesar de las promesas del Presidente Hassan Rouhani de poner fin a la discriminación religiosa.

A pesar de la persecución, los Bahá’ís en Irán han respondido con fortaleza y están involucrados frecuentemente en proyectos para servir al avance de sus comunidades.

En respuesta al creciente interés sobre la persecución de los bahá’ís de Irán, la Comunidad Internacional Bahá’í ha lanzado un sitio web que ofrece una visión de varias décadas de trato discriminatorio contra los bahá’ís en ese país. El sitio web, que se llama Archivos de la persecución de los bahá’ís en Irán (iranbahaipersecution.bic.org), pone a disposición, por primera vez, miles de documentos oficiales, informes, testimonios y material audiovisual, pruebas documentales reveladoras de años de opresión implacable.