—Madrid, 21 de noviembre de 2019—. Irán ha sido condenado una vez más por la comunidad internacional por sus continuas violaciones de los derechos humanos. Un comité de la Asamblea General de las Naciones Unidas ha expresado su profunda preocupación por los continuos ataques del país contra las minorías religiosas, entre las que se encuentran los bahá’ís.

La resolución fue adoptada hoy por la Tercera Comisión de la Asamblea General, con 84 votos a favor, 30 en contra y 66 abstenciones.

La resolución de seis páginas expresa «grave preocupación por las estrictas limitaciones y crecientes restricciones del derecho a la libertad de pensamiento, conciencia, religión o creencias, (…) contra personas pertenecientes a minorías religiosas, tanto reconocidas como no reconocidas, incluidos (…) los miembros de la Fe bahá’í (…)».

Esta resolución es consecuencia de dos informes recientes sobre Irán. Javaid Rehman, relator especial sobre la situación de los derechos humanos en Irán, señaló en su informe de julio que «En los últimos 40 años, los bahá’ís, que se consideran la mayor minoría religiosa no musulmana y no reconocida de la República Islámica de Irán, (…) han sufrido las formas más atroces de represión, persecución y victimización».

Además, el Secretario General, en un informe (en inglés) de septiembre sobre Irán, incluyó la siguiente recomendación: «El secretario general insta al Gobierno a que garantice la protección de los grupos minoritarios y de las personas, y a que respete y aplique la legislación que los protege».

Mientras tanto, en Ginebra, durante la 34ª sesión del Examen Periódico Universal, un gran número de países criticaron a Irán por su violación de los derechos de las minorías religiosas, lo que condujo a seis recomendaciones que se refieren específicamente a los bahá’ís.

«Acogemos con satisfacción esta resolución y su condena de las atroces violaciones de los derechos humanos cometidas por Irán», declaró Bani Dugal, principal representante de la Comunidad Internacional Bahá’í ante las Naciones Unidas.

«La aprobación de esta resolución envía un firme mensaje a las autoridades iraníes de que la comunidad internacional está bien informada de las continuas violaciones contra los bahá’ís y otras minorías religiosas, y de que no se tolerará la discriminación y el acoso constantes de ningún grupo minoritario religioso por el simple hecho de practicar su fe».

La resolución será confirmada por el pleno de la Asamblea General en diciembre de este año.