Oficina de Asuntos Públicos

Noticias y notas de prensa

Un seminario en el parlamento británico destaca los vínculos entre la libertad religiosa y la prosperidad económica

Comparte este contenido

Londres, 6 de marzo de 2016.- En Irán, la comunidad bahá’í continúa sufriendo una intensa persecución basada únicamente en sus creencias religiosas, lo que es una clara violación de uno los derechos humanos fundamentales. Desafortunadamente, la libertad de religión o de creencia es uno de los derechos más vulnerados en todo el mundo.

En un seminario celebrado el 2 de marzo de 2016 en el Parlamento británico, y organizado por el Grupo Parlamentario de Todos los Partidos sobre la Fe Bahá’í, se mencionó que existe una fuerte correlación entre la libertad religiosa, la libertad económica y otras libertades políticas civiles. Un aspecto destacado de la investigación, y aún no reconocido, sugiere que garantizar y respetar estas libertades dentro de los negocios podría, no sólo abordar una gran lacra social, sino también, ser un activo para la recuperación económica y el crecimiento.

1099_02«Estos resultados son útiles en nuestros debates sobre negocios», dijo el conferenciante, el profesor Brian Grim, Presidente de la Asociación por la Libertad Religiosa y el Comercio, «y hay muchas cosas que el mundo de los negocios puede ofrecer a la comunidad sobre derechos humanos». Se sugirió que los líderes empresariales y emprendedores podrían desarrollar un interés a largo plazo en relación con esta área del discurso internacional de los derechos humanos, y que sus perspectivas pueden aportar comprensión a los gobiernos y parlamentos del mundo.

«El negocio es la encrucijada de la cultura, del comercio y de la creatividad. Lo que reúne a todo el mundo y produce un servicio exitoso, innovación o producción es un objetivo común», dijo el Profesor Grim, quien destacó los esfuerzos de un importante fabricante de automóviles que, al darse cuenta de este hecho, contrató a personas de casi 140 países. Este fabricante ofrece un premio anual a la innovación intercultural e interreligiosa.

El seminario, que atrajo alrededor de unos 70 participantes, incluyendo parlamentarios, funcionarios, académicos, activistas de derechos humanos, profesionales y líderes de distintas comunidades religiosas, fue inaugurado por el parlamentario Jim Shannon, que también preside este Grupo Parlamentario de Todos los Partidos con la libertad de religión o de creencias internacionales. «La libertad religiosa es un componente fundamental de la paz y estabilidad», dijo el Sr. Shannon. «Sin libertad religiosa, personas con talento son apartadas». El asunto necesita ascender en la agenda política, dijo el Sr. Shannon, para garantizar la seguridad, estabilidad y una mayor prosperidad económica.

También en el seminario se encontraba la baronesa Anelay de St Johns, representante del Ministerio de Estado en el exterior y la Commonwealth Office. La baronesa Anelay mencionó que debido a la intolerancia creciente alrededor del mundo, este compromiso es necesario más que nunca. «La libertad de religión o de creencia no es sólo un extra opcional junto con el amplio espectro de los derechos humanos. Es un derecho humano clave en y por sí mismo» comentó. «Donde el derecho a la libertad de religión o de creencia no es totalmente respetado, se deduce que los valores democráticos y el estado de derecho no se aplican plenamente. Una de las claves para el éxito es la educación», confirmó la baronesa Anelay. «Necesitamos asegurar que los niños aprecien desde la más temprana edad que cada uno debe ser valorado igual».

Otra conferenciante, la Dra. Nazila Ghanea —profesora de Derecho Internacional y derechos humanos en la Universidad de Oxford—, destacó la importancia de que cada individuo tenga la libertad de decidir si adoptar o no una religión o creencia. «El requisito previo a la libertad de religión y creencia es la libertad de investigar independientemente la verdad y adoptar una creencia, ya sea religiosa o no», mencionó la Dra. Ghanea. Refiriéndose al documento de la comunidad internacional bahá’í «La libertad de creer», la Dra. Ghanea citó, «la tarea primordial del alma siempre será investigar la realidad, para vivir de acuerdo a las verdades que se llegan a comprender, y al pleno respeto de acuerdo a los esfuerzos de los demás a hacer lo mismo».

La profesora de Oxford se preguntó cómo tales valores pueden ser alcanzados, teniendo en cuenta que los esfuerzos por transferir las normas a través de diferentes culturas pueden experimentar resistencia. «Las normas internacionales deben ser digeridas de manera significativa y las personas tienen que hacerlas propias», dijo. «La consulta es una manera importante de tratar de adaptar estos valores en los barrios y sociedades».

Más tarde se realizaron grupos de discusión participativos donde se exploraron ideas innovadoras para sensibilizar, apoyar la libertad religiosa y equipar empresas con herramientas e ideas.

El seminario pretende ser el primer paso de un largo proceso para construir una comprensión conceptual de cuestiones relacionadas con la libertad de religión o creencia en la vida política británica y en la sociedad.