La comunidad bahá’í de España cuenta con miembros de procedencias culturales y étnicas diversas, tanto de dentro como de fuera de sus fronteras; diversidad que se ve reflejada en su riqueza artística y lingüística. Además, la cultura de la comunidad se está transformando conforme los bahá’ís se esfuerzan por aplicar las enseñanzas de Bahá’u’lláh a sus vidas individuales y colectivas. El modo de hacer referencia a esta religión es Fe bahá’í, aunque a veces se la denomina bahaismo.
Actualmente, en España, hay cerca de 5.000 bahá’ís que se esfuerzan, junto con amigos y vecinos, por aplicar las enseñanzas de Bahá’u’lláh a sus vidas individuales y colectivas para contribuir a la mejora de sus entornos.
Los que participan en las actividades de la comunidad proceden de los mismos orígenes culturales, étnicos y nacionales que caracterizan a la sociedad española. La mayor parte de estas actividades se centran en promover la educación espiritual de los niños; en hacer esfuerzos por liberar los poderes de los jóvenes adolescentes (denominados prejóvenes) para servir a la sociedad y desarrollar una identidad sólida; en ayudar a empoderar y a desarrollar capacidades para el servicio a jóvenes y adultos que se relacionan en el contexto del barrio, y en establecer espacios para la oración y meditación colectiva que fortalezcan el carácter devocional de las comunidades.